¿Cómo nos comportamos dentro del ascensor?
Una de las situaciones más incómodas a las que nos enfrentamos cada día es entrar en un ascensor y comprobar que ya hay gente dentro. En esos momentos, ¿qué debemos hacer? ¿Saludar a los ocupantes y declinar el viaje?, ¿o armarnos de valor, entrar y poner cara de circunstancias?
Depende de lo que veamos en el interior
La elección de subir o no al ascensor cuando ya hay gente dentro dependerá en gran medida de nuestra percepción acerca de las personas que ya ocupan el ascensor.
Si se trata de una persona obesa, que está sudando o con un aspecto que nos produce rechazo, casi seguro que preferimos esperar al siguiente viaje, a pesar de que tengamos mucha prisa. En cambio, si no percibimos a la persona como una amenaza, aunque no nos haga gracia estar acompañados, seguramente tomaremos el ascensor.
En ciudades grandes, donde la vida se hace de edificio en edificio, no nos queda otro remedio que convivir con ello. En España hay más de un millón de ascensores de numerosos tipos, según las necesidades concretas de cada comunidad o edificio. Y gracias que los tenemos, porque gracias a la gran variedad de ascensores para Barcelona puedes encontrar multitud de modelos que solucionan los problemas más complejos.
Qué hacer durante el viaje
Nos ha llamado la atención esta curiosidad y queremos compartirla contigo: investigadores de universidades americanas aseguran que todos nos comportamos de forma similar en cuanto compartimos el ascensor.
Primero nos retiramos a una esquina y, a medida que se va llenando, los nuevos ocupantes hacen lo propio en las esquinas restantes. El que peor lo pasa es el que, por falta de espacio, solo puede colocarse en el centro.
Es en ese momento en el que todos bajamos la vista para no enfrentarnos por unos segundos con el de al lado.
También es muy común mirar fijamente la pantalla que va marcando los pisos.
Y eso si no tenemos miedo a estar encerrados. Si ese es nuestro caso, lo único que nos queda es… respirar hondo y convencernos a nosotros mismos de que contar con una buena empresa de mantenimiento solucionará de forma rápida la peor de las situaciones que podamos imaginarnos.